De lo virtual a lo físico

Nosotros estamos ubicados en un parque tecnológico, nuestros clientes son de base tecnológica. Por tanto, se puede entender que estamos muy predispuestos a todo aquello que coloquialmente denominamos “lo virtual”, aquello que no podemos tocar ni llevarnos a nuestra casa. Vaya, lo físico.
Sin embargo, con todos ellos estamos desarrollando estrategias de productos físicos, productos estandarizados y que provoquen unas ventas recurrentes, reales, diarias, es decir, el trocito de pan de todos los días.
LO virtual esta muy bien, nos apasiona a todos, pero luego hay que transformarlo en algo real, tangible, VENDIBLE, sino nos quedamos con emprendedores con un talento envidiable y con proyectos tristemente fallidos. Todo esto también tiene que ver indirectamente con la burbuja de emprendedurismo en la que vivimos, multitud de entidades y empresas públicas y privadas de todo tipo que ofrecen al emprendedor vías de financiación a la innovación y no se que más que nadie entiende. Parece como un negocio paralelo de los de siempre, surgido de políticas europeas que seguramente en otros países funcionarán, pero aquí se diluyen en no se sabe que y en no se sabe quien. O si se sabe, pero hacemos la vista gorda, pero eso ya es otra cosa.
Creo que debemos pensar más en lo físico, en lo que podemos aportar a nuestro entorno más cercano y no en soñar con grandes pelotazos, que dicho sea de paso no son tantos, empresas tecnológicas de última generación que tengan una cuenta de resultados en positivo se pueden contar con los dedos de dos manos en este país.
Por otro lado, la burbuja de la internacionalización, hay que vender fuera y rápido, pero ¿el que?, ¿que producto hemos de vender?, y ¿como lo vamos a vender?, si para poder hacer un viaje comercial y cruzar el charco hemos de pedir financiación…No se, me parece que las cosas no van como nos hacen pensar que van, y que las realidades del emprendedor tecnólogo distan mucho de las herramientas o recursos pensados para ellos desde las diferentes administraciones, que piensan en virtual no en físico, en real.